Carta a los verdaderos dueños del Club.

Venimos estos días de perder 4 puntos en el campeonato liguero, de ver como la ilusión del VAR nos estallaba en toda la cara y cerramos con la renovación del Tristata a manos del hollycows social club, un culé de bien no podía recibir noticia más desilusionante; certifica que el club esta totalmente en las manos mezquinas de un grupo de divos mimados y a estas alturas, sin crédito que quemar; pero, sobre todo, que a corto o mediano plazo no habrá cambio alguno.

No hay esperanza de que aparezca el  más mínimo resquicio de meritocracia en el equipo, Ya Valverde agradeció la confianza que depositaron en el sus jefes de vestuario y tiro flores a Rakitic, que será titular hasta que, en unas décadas,  un infarto al miocardio lo obligue a parar por unos días, Suarez podrá seguir reclamando a todo mundo, compañeros  eventuales y árbitros,  todo menos a Messi, mientras falla goles cantados, arruina jugadas claras de ataque y pasa otros 2 o 3 años sin marcar de visita en champions, total, eso de los goles esta sobrevalorado en un delantero si este hace peña y ayuda a que el vestuario sea un plaza sésamo con todos cantando canciones y comiendo perdices.

Y así seguiremos, cada día jugando peor, haciendo fichajes sin sentido, las viejas glorias cada día más viejas pero viviendo de lo conseguido en el pasado, como si no se les hubiese pagado y muy bien por ello. Como si lo ganado antes de repente se convirtió en un cheque en blanco y no es posible ni la critica ni la exigencia, esta prohibido decir  que eso ya paso , ya fue, lo disfrutamos mucho pero un club que se gasta tanto o mas que los petroclubes que antes criticábamos  necesita renovar constantemente sus éxitos, o al menos luchar por alcanzarlos, cosa de la que se ha carecido totalmente estas ultimas temporadas, porque yo no olvido como se cayó en Paris, Turin o Roma, una vez es accidente ¿pero tres? Eso solo tiene una explicación.

Y bien, ahí tienen a su DT, lo han puesto ustedes, elegido a su gusto, medida y conveniencia, así que cuando venga el batacazo ya no podrán excusarse en él, porque nadie culpa al títere en una mala obra de teatro, la culpa es del que lo maneja.

By Abdou