A una década del 2-6
Es curioso como han
cambiado las tornas, o lo poco que lo han hecho; hace diez años de aquel Barca que maravillaba
donde saliese a jugar y que ganaba quizás lo mismo que el actual,
que juega mas feo que el Atlético del Cholo pero esta ahí, a tres
juegos de un tripletazo en toda regla, había pensado escribir algo
sobre el partido de aquel ya lejano ida, orgásmico a todo nivel,
pero tras lo de ayer se me fue de la cabeza totalmente, así que solo
voy a reproducir parcialmente lo que escribió el abuelo pitufo
mandrilista tras tremenda paliza, y talvez nos quitamos un poco el
mal sabor de boca que nos dejo el apático Couto y el resultadismo del
Tata III.
Así sólo se juega al fútbol en el Paraíso
Se acabó la
persecución. El Barça se marchó del Bernabéu como campeón
virtual de Liga y dejando para la historia una exhibición de la que
aún se hablará cuando todos nosotros hayamos muerto. El exquisito
fútbol del Barça durante toda la temporada estalló ayer en su
mejor versión. Ni cansancio, ni nervios, ni gaitas. Fútbol, puro
fútbol, hecho de toque, astucia y profundidad. Fútbol que produjo
seis goles y que paró ahí por Casillas y porque en ocasiones la
jugada se recreó tanto que acabó perdiéndose.
Guardiola no se
guardó nada. Se había especulado con la posibilidad de que
reservara a Henry, pusiera a Iniesta de extremo y acompañara a Xavi
con dos medios de fuerza. No hizo tal. Sacó todo lo mejor porque
quería ganar este partido, que le podía asegurar no sólo un título
sino también la tranquilidad para encarar los otros dos. Y así fue.
Ya no hay Liga, una preocupación menos. Con ese fin sacó al Barça
en su mejor versión, con el truco táctico además de mover a Messi
del extremo para correrlo hacia el medio campo, donde la superioridad
técnica y numérica del Barça fue arrasadora. El Madrid sufrió,
atónito y sin respuestas.
Esta
exhibición deja atrás aquel legendario 0-5 de 1974, y el 0-3 de
hace poco y menos, con los aplausos a Ronaldinho. Tampoco el Madrid
estuvo muy lúcido ayer: salió con la defensa muy adelantada,
exponiéndose a pases a la espalda; Sergio Ramos fue un coladero ante
Henry (magnífico) aunque compensase algo con su presencia en el
primer gol y su autoría del segundo. Pero es igual. Con una u otra
fórmula, el Madrid hubiera sido batido por este Barça perfecto, que
hizo un fútbol tan bueno como nunca se ha visto. Supongo que ni en
el Paraíso se jugará mejor. Como mucho, igual. Sombrerazo.
By Emteke